El próximo martes 5 de abril, el Senador y líder campesino Alberto Castilla radicará el Proyecto de Acto Legislativo “Por medio del cual se reconoce al campesinado como sujeto de derechos, se reconoce el derecho a la tierra y a la territorialidad campesina y se adoptan disposiciones sobre la consulta popular”. El acto contará con la asistencia de líderes de la Cumbre Agraria, Campesina, Étnica y Popular y otras organizaciones sociales, congresistas de diferentes bancadas y la realización de un mercado campesino en las instalaciones del Congreso de la República.
“El objetivo del proyecto es intentar saldar la deuda histórica que la sociedad colombiana tiene con el campesinado. Reconocer que ha sido una de las principales víctimas de la violencia y del despojo. Reconocer su importancia en la producción de alimentos que todos consumimos y en el cuidado de los recursos naturales. Reconocerlo como un interlocutor, de tal forma que se posibilite avanzar en la construcción de paz en las regiones”, señala Alberto Castilla, autor de la iniciativa.
Factores como las recientes movilizaciones campesinas, la crisis del sector agropecuario, el auge del modelo agroindustrial y las afectaciones a territorios campesinos a causa de megaproyectos de infraestructura y minero-energéticos, ponen de presente la falta de reconocimiento del campesinado. Ante esta realidad, Alberto Castilla, quien llegó al Congreso de la República como fruto de sus luchas en el movimiento campesino, ha venido trabajando desde el momento de su posesión como Senador en una reforma constitucional que le otorgue reconocimiento al campesinado como sujeto de derechos. Esta propuesta se ha venido construyendo de la mano de organizaciones campesinas, en diferentes audiencias y encuentros que se han adelantado en varias regiones del país.
Se busca también plantear en el país una discusión que se viene desarrollando en espacios como las Naciones Unidas, donde se promueve una Declaración internacional de los derechos de las campesinas y campesinos que proteja a campesinos, campesinas y otros trabajadores de las zonas rurales.
Los principales componentes de la propuesta son la inclusión de las palabras “campesino” y “campesina” en la Constitución política, reconocer el derecho a la tierra, la construcción social del territorio por parte de comunidades campesinas, el derecho a las semillas, garantizar la equidad de género en la distribución de recursos productivos del agro, establecer la obligatoriedad de la consulta popular en caso de que haya afectación de territorios campesinos y ordenar la adaptación de los derechos sociales a las particularidades del campesinado y su modo de vida.
La radicación del proyecto estará acompañada por un mercado campesino en las instalaciones del Congreso de la República el día 5 de abril, como muestra de la importancia cultural y del aporte a la soberanía alimentaria del campesinado. Los mercados campesinos atraviesan por una grave crisis en la ciudad de Bogotá, dado que la nueva alcaldía se ha opuesto a la realización de estos espacios, lo que confirma la exclusión y falta de reconocimiento de la población campesina. La realización del mercado estará a cargo de organizaciones como ADUC y FENSUAGRO, apoyadas por OXFAM. Se espera que su presencia en el Congreso sirva para mostrar la necesidad de se brinde apoyo a estas iniciativas y se garanticen los espacios para su desarrollo.